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Los OMEGA Olympic Pocket Watch 1932 Rattrapante Chronograph, en oro de 18 qt amarillo, blanco o rojo, están animados por juegos de movimientos que se descubrieron, todavía sin montar, almacenados en la sede de OMEGA, en Bienne, Suiza, desde 1932. Esas maravillas de la relojería vuelven a dar vida a un producto histórico: el cronógrafo de bolsillo de 1932.
Hace varios años, en un rincón oculto de la sede central de OMEGA, se descubrieron varios juegos de movimientos sin montar. Nuestros maestros relojeros reacondicionaron aquellos componentes, almacenados desde hacía 80 años, y los utilizaron para crear una réplica mejorada del cronógrafo de bolsillo de 1932: el mismo cronógrafo que se había utilizado aquel año para cronometrar los Juegos Olímpicos de Los Ángeles.
Se montó un total de 300 de esos cronómetros, que fueron certificados por el COSC, 100 ejemplares por cada variante de caja: oro de 18 qt amarillo, blanco o rojo, símbolos perfectos de las medallas de oro, plata y bronce cuyos ganadores habían sido determinados por los icónicos antepasados de dichos relojes. Olympic Pocket Watch 1932 Rattrapante Chronograph tiene una esfera en esmalte blanco que es réplica de la original con ciertas actualizaciones e incorpora el calibre OMEGA 3889A que integra un mecanismo de cronógrafo con ratrapante, controlado por una doble rueda de pilares. En el fondo de caja va el logotipo, los cinco aros de los Juegos Olímpicos, junto con las frases grabadas Official Timekeeper of the Olympic Games y Limited Edition, además del número de edición de cada modelo: (001/100).
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