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El año 1969 fue un punto de inflexión en la historia del OMEGA Speedmaster. No solo se convirtió en el primer reloj que se llevó en la Luna, sino que la colección introdujo un nuevo modelo conocido como Mark II. Con su distintiva caja aerodinámica, se ha convertido desde entonces en uno de los diseños de cronógrafos vintage más apreciados del mundo. <p> Hoy, la colección continúa con una selección de relojes de pulsera en acero noble, todos presentados en brazaletes metálicos con detalles propios. La escala taquimétrica transparente está bellamente iluminada desde abajo por un aro de aluminio relleno de Super‑LumiNova, mientras que los relojes presentan esferas negras o grises protegidas por un cristal de zafiro resistente al rayado. <p> En su interior, los relojes suizos de lujo están impulsados por movimientos Co‑Axial de carga automática con certificación de cronómetro. El resto de los elementos ofrece un impresionante aspecto retro, junto con el espíritu aventurero que caracteriza este legendario reloj.